info@directoajapon.com-
info@directoajapon.com
Cada vez son más las personas que se animan a viajar a Japón con niños. Tener hijos no debe ser un impedimento para poder conocer mundo, y Japón es un destino que puede ofrecerte muchas opciones si éste es tu caso.
Ya sabemos que viajar con bebés no es lo mismo que hacerlo con niños algo más mayores, o incluso adolescentes, así que en este artículo vamos a tratar el caso aquellos que estén pensando viajar con niños pequeños. Concretamente trataremos temas como el viaje en avión, el paso por el aeropuerto, alimentación en Japón, medicamentos y moverse por el país.
Antes de nada, agradecer a nuestro amigo Alex, de nuestro grupo de Telegram "Directo a Japonizados" (puedes pedirnos acceso a través de nuestras redes sociales o vía e-mail), toda la información facilitada y basada en en su reciente viaje a Japón con su hijo de 22 meses. Dicho esto, ¡comencemos!.
Lo primero que suele preocupar al viajero con hijos pequeños es el momento de acceder al avión y pasar por la experiencia de un vuelo largo, con o sin escalas según la compañía que elijas. En los aeropuertos normalmente ofrecen facilidades para aquellas familias con hijos, tanto en las colas de facturación y seguridad, como a la hora de embarcar.
Prácticamente todos los aeropuertos principales disponen de accesos preferentes para familias que viajen con niños.
Algo que suele preocupar bastante a los padres viajeros es el límite que puedan imponer los aeropuertos a la hora de acceder al avión con líquidos y demás alimentos para el niño. Pero no hay de qué preocuparse ya que, según se indica en la propia web de AENA, están permitidos:
Líquidos que deban ser utilizados durante el viaje*, bien por necesidades médicas o por necesidad de dietas especiales, incluyendo la comida de los niños.
Se recomienda que, en la medida de lo posible, el pasajero lleve consigo la receta médica o justificación de su condición particular.
* Viaje = vuelo de ida estancia vuelo de vuelta.
Debes recordar que todos estos líquidos debes presentarlos fuera de tu equipaje de mano para la pertinente inspección en los controles de seguridad. Y nada mejor que ponerte un ejemplo real, y es que según nos informó Alex, ellos pasaron el control sin problemas con:
Una botella de medio litro de agua
Tres brick de zumo
Las tomas de leche necesarias para el viaje
Fruta variada para el bebé
Y estos límites no son solo aplicables a nuestros aeropuertos de salida, ya que en Japón también tienen en cuenta las necesidades especiales de los niños pequeños y no ponen objeciones a la hora de acceder con sus alimentos. No sabemos si esta permisividad se aplica a niños de cualquier edad pero, según nos informan, para niños de hasta 2 años no hay ningún tipo de problema.
En cuanto a medicamentos, no existe una limitación en cuanto al volumen de aquellas medicinas que sean líquidas, siempre y cuando su uso sea necesario durante el viaje. Estos medicamentos deben presentarse aparte en el momento del control de seguridad, siendo recomendable llevar encima las recetas médicas pertinentes o un justificante de la enfermedad para la que son requeridos
Si viajas con tu propio carrito debes saber que deberás pasarlo por el control de seguridad totalmente plegado. Tras el control, podrá volver a usarse hasta el embarque, momento en el que la tripulación lo recogerá y te lo devolverá cuando llegues a destino (sin coste extra).
Y hablando del momento del embarque, si has volado alguna vez ya sabrás que se suele llamar primero a aquellas familias que viajan con niños, así que presta atención para presentarte al principio de la cola cuando sea requerido.
A continuación vamos a darte algunos datos relativos a viajar con bebés o niños de hasta 2 años que tal vez no sepas y que consideramos importantes.
► Billetes de avión: los bebés y niños pequeños de hasta 2 años no pagan billete, únicamente las tasas. A cambio no tienen asiento propio, por lo que deben viajar sobre los padres con un cinturón supletorio que va enganchado al de la madre o padre.
Algunas compañías aéreas ofrecen la posibilidad de reservar en vuelos intercontinentales una cuna para niños menores de 8 meses. Consulta con ellos si disponen de esta opción.
► Documentación: es muy importante que los niños dispongan de pasaporte y que le quede, como mínimo, un período de vigencia de 6 meses. Esto es aplicable para vuelos internacionales (fuera de la zona Schengen, dentro es suficiente con el DNI), bastando el Libro de Familia en vuelos domésticos para aquellos niños menores de 14 años. Dispones de información más detallada en la web de AENA.
► Alimentación: se suele aconsejar dar el biberón en el momento del despegue y el aterrizaje por dos motivos. Por un lado para distraerlos de ese momento en el que podrían ponerse nerviosos (como nos pasa a muchos adultos), y por otro lado para contrarrestar los efectos del cambio de presión, algo que puede resultarles molesto. Y como mencionamos anteriormente, puedes subir al avión la comida del bebé sin ningún tipo de problema. También es bueno que sepas que podrán calentar la comida del bebé durante el viaje, simplemente solicítaselo a los auxiliares de vuelo.
Una vez aterrices en Japón comprobarás que sigues gozando de privilegios por viajar con niños. Y es que, desde que vean que viajas con tu bebé, te sacarán de la cola general en Inmigración y podrás ahorrarte unos valiosos minutos. Lo mismo se aplica para la cola en aduanas, donde tal vez huelan alguno de los líquidos que lleves encima para tu bebé como medida de seguridad.
Mayoritariamente te moverás por Japón en tren, un servicio la mar de cómodo y puntual. En cuanto al coste de los billetes, debes saber que los niños hasta 5 años (incluidos) viajan gratis, excepto en aquellos casos en que se viaje con más de dos menores por adulto o se pretenda ocupar un asiento reservado por uno de los niños.
En los vagones de metro existen asientos prioritarios para personas que viajen con niños pequeños, estando ubicados en las cercanías de las puertas, así que búscalos e intenta hacerte con uno. En caso de que el niño vaya en su carrito, recuerda plegarlo antes de acceder al vagón para no molestar al resto de viajeros. Verás que en Japón es normal que nadie haga ruido en los vagones de metro o tren, pero no te agobies si tu bebé comienza a llorar o se pone algo nervioso. Normalmente los niños pequeños reciben muchas atenciones en Japón, así que no sería de extrañar que se te acercara alguna adorable anciana japonesa o incluso un empleado del tren para hacerle carantoñas a tu retoño.
Otro consejo que podemos darte es que planees con tiempo de sobra los transbordos que tengas pensado hacer entre trenes, ya que moverse con niños requerirá algo más de tiempo. Normalmente existen ascensores para moverse entre andenes, pero algunas estaciones pequeñas no disponen de ellos, así que tenlo en cuenta a la hora de moverte. También es aconsejable que intentes evitar las horas punta en las grandes ciudades, ya que puede ser bastante complicado acceder a los vagones con niños pequeños.
La inmensa mayoría de hoteles de estilo occidental en Japón (por no decir la totalidad) cuentan con cunas para niños pequeños, las cuales deberás solicitar con antelación al realizar tu reserva. Aunque gran parte de las habitaciones están pensadas para personas que viajen en pareja, o incluso en solitario, existen también habitaciones familiares o de un tamaño adecuado para que puedan estar cómodos durante la estancia, aunque estas son algo más difíciles de encontrar. Normalmente no suele pagarse ninguna tarifa de alojamiento para aquellos niños menores de un año, pero consúltalo antes con tu alojamiento para asegurarlo.
En cuanto a alojamientos más tradicionales, como un ryokan, no todos cuentan con estas facilidades. Así que te aconsejamos realizar la consulta al alojamiento antes de realizar la reserva. Otra opción válida para familias es la de reservar un apartamento turístico, así que valora también esta opción si no encuentras lo que andas buscando.
Si algo sobra en Japón son sitios para poder comer, y cuando se viaja con niños la oferta es igual de extensa. En Japón existe un gran número de restaurantes familiares, totalmente adaptados para atender a familias con niños. Incluso en aquellos lugares en los que te parezca que no puedes entrar con tu hijo/a es más que probable que dispongan de asientos especiales para los más pequeños, así que no descartes ningún sitio y acércate a preguntar.
En cuanto a comprar comida para los niños, no tendrás ningún problema para encontrar todo lo necesario en los innumerables konbinis (tiendas 24 horas) o supermercados repartidos por todo el país. Tendrás a tu disposición comida para bebés, fruta, agua embotellada para los biberones e incluso pañales.
Japón tiene mucho que ver, pero no siempre sabemos a dónde ir cuando se viaja con niños pequeños. Podrás comprobar que el país cuenta con muchísimos parques en todas sus ciudades y pueblos, como por ejemplo el Parque Yoyogi en Tokio.
También suelen celebrarse distintos eventos por la ciudad que harán las delicias de tus pequeños, o podrás llevarlos a alguna de las muchas jugueterías (como Kiddy Land) o tiendas especializadas en productos para niños, como podría ser cualquier tienda Pokemon, o alguno de sus parques temáticos (Tokyo Disneyland, Universal Studios Japan en Osaka, etc).
Pero no todo tiene por qué desarrollarse en las ciudades, así que recuerda que Japón tiene muchísimas zonas rurales y bosques a los que poder acercarte para pasar una jornada inolvidable con toda la familia. Otra opción puede ser descubrirles algunos de los templos o santuarios más importantes de Japón, algo que seguramente les podrá sorprender y entretener.
No olvides que una parte importante en la educación de un niño es ayudarle a conocer y respetar lo que le rodea, y un viaje a Japón es una oportunidad inmejorable para aprender cosas que no vería en su día a día. Y ya que mencionamos el respeto, no está de más advertirte que a lo mejor no es buena idea meterte con niños pequeños en tiendas con pasillos estrechos y mil objetos en sus estanterías, como las que puedes encontrar por Akihabara.
En este apartado te recomendamos hacerte con un seguro de viaje para que, ante cualquier percance, tengas la asistencia necesaria. Nosotros llevamos tiempo viajando con IATI Seguros, una empresa con años de experiencia en el sector y que ofrecen una atención estupenda.
Nuestra recomendación para aquellos que viajen en familia es contratar el seguro IATI Familia, la opción perfecta si lo que buscas es atención pediátrica telefónica, servicio de urgencias 24 horas y todo lo que puedas necesitar con amplias coberturas. Si estás interesad@ podrás adquirirlo a través de nuestra tienda online.
Esperamos que todas estas recomendaciones y consejos puedan serte útiles en la planificación de tu viaje con niños pequeños. Agradecemos enormemente las experiencias que comparten los lectores de la web con nosotros y que te hacemos llegar para que compruebes por ti mismo que viajar a Japón con niños no es una misión imposible. Así que si ya has vivido esta experiencia y quieres compartirla con otros viajeros que puedan estar en la misma situación que tú antes del viaje, recuerda que puedes hacerlo en los comentarios. Le será de gran ayuda a mucha gente y nosotros te estaremos agradecidos por tu colaboración ^_^ .
Comentarios
